Comparto con vosotros este artículo de RAQUEL ALCOLEA DÍAZ para mujerhoy.com donde colaboro habitualmente.
Algunos alimentos contribuyen a reforzar la inmunidad del cuerpo ayudándole a prepararse para luchar contra los agentes infecciosos que le atacan durante los meses de otoño e invierno, cuando son más probables los cambios de temperatura que tanto nos afectan.
Para prevenir las infecciones típicas del invierno lo más indicado es, según la Dra. Sagrario Jiménez, experta en nutrición del Centro Médico Sagrario Jiménez y Doctoralia, consumir alimentos que mejoren la capacidad de nuestro organismo para luchar contra los agentes infecciosos o, lo que es lo mismo, alimentos que mejoren nuestra inmunidad. Aunque los expertos consultados afirman que existe una larga lista de productos que pueden tener efectos favorables sobre la inmunidad, estos son sus doce favoritos:
Alimentos fermentados (probióticos), como el yogur, el kéfir o el chucrut.
Para la Dra. Jiménez, el estado de nuestra microflora intestinal es decisivo para el desarrollo del sistema inmune, pues su buen estado va a hacer que determinados gérmenes patógenos tengan menor capacidad para infectarnos.
Así, según explica, se ha demostrado que el consumo de alimentos fermentados aporta probióticos, que son eficaces para prevenir infecciones del tracto respiratorio y del urinario; además de proteger frente a recaídas de infecciones respiratorias recurrentes, sobre todo en los casos de bronquitis y sinusitis.
Huevos.
Son proteínas completas, pues aportan nueve aminoácidos esenciales que el cuerpo necesita y que sólo se obtienen con la alimentación.
Mantienen el buen estado del sistema inmunológico, según revela la experta Sagrario Jiménez, lo que contribuye a prevenir las infecciones, a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares por su aporte en ácidos grasos esenciales como el ácido oleico, el linoleico y el linolénico y a beneficiar la salud visual por si riqueza en luteína, pigmento que protege al ojo de la degeneración macular.
Otros aportes del huevo son: antioxidantes como la vitamina E, selenio, carotenos, vitamina A, vitaminas del grupo B (especialmente ácido fólico y vitamina B12), vitamina D y minerales como sodio, potasio, calcio, magnesio y zinc, un mineral que previene los resfriados y ayuda a acortar su duración si se padecen.
Ajos.
Es un antibiótico natural, con propiedades bactericidas, inmunoestimulantes y antivirales, al que se le atribuyen propiedades curativas y preventivas.
Su alto contenido en compuestos de azufre le convierte, tal como recuerda la Dra. Sagrario Jiménez, en un alimento útil para prevenir procesos infecciosos del aparato respiratorio, pero también del digestivo y del urinario.
«Tomar de forma regular un diente de ajo crudo ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y a prevenir los resfriados», explica. Sus 20 principios antivíricos ayudan a prevenir gripes y resfriados y, en el caso de que ya se padezcan, favorecen su curación porque tienen efecto mucolítico y expectorante.
También el ajo es el alimento que propone como su favorito para combatir los resfriados el equipo nutricional de Yocomobien.es, desde donde añaden que es un alimento que, por su aporte de vitamina C y zinc aumenta las defensas y mejora la respuesta del organismo antes el ataque de virus y bacterias.
Legumbres.
Por ser alimentos ricos en antioxidantes, actúan como antigripales naturales, según revelan en Yocomobien.es, y ayudan a reducir las toxinas que provoca la infección.
«Son ricas en las vitaminas del grupo B y en minerales que fortalecen nuestras defensas, como el hierro y el magnesio», aseguran. Mención especial merecen los garbanzos pues, tal como explica Marta Gámez, directora técnica del Grupo NC Salud, su fibra dietética (13,6 gramos por cada 100 gramos de peso) estimula el desarrollo de la flora intestinal, íntimamente relacionada con el sistema inmunológico.
«Tener una buena flora intestinal reducirá las probabilidades de infecciones», explica la experta, quien además añade que es importante complementar la ingesta de fibra con productos simbióticos que aporten bacterias beneficiosas para nuestra flora.
Granada.
No es extraño que haya sido una de las apuestas estrella de nuestros nutricionistas para convertirse en el alimento estrella del otoño, tal como contamos en Mujerhoy.com hace unos días.
De hecho, en Yocomobien.es apuestan por esta fruta como el alimento ideal para prevenir los resfriados gracias a su aporte en vitamina C, sus antioxidantes y el ácido fólico que incluye, aportes que hacen que sea muy efectiva reforzando el sistema inmunológico.
Col.
Con 100 gramos de este vegetal, conseguimos el 131% de la cantidad diaria recomendada para cubrir nuestras necesidades, según revela la experta de Grupo NC Salud.
Esto, sumado al hecho de que se puede consumir en ensaladas para preservar su vitamina la convierten en una de las mejores opciones para consumir esta vitamina, que contribuye al funcionamiento de nuestro sistema inmunológico y previene los catarros.
Caqui.
Es una fuente excepcional de provitamina A, sustancia que se transforma en vitamina A, que contribuye a la prevención de los resfriados, tal como explica Marta Gámez, de Grupo NC Salud.
Un caqui de tamaño medio cubre el 21% de las necesidades diarias de esta vitamina, a lo que hay que sumar su nada despreciable cantidad de vitamina C.
kiwi.
La vitamina C estimula el sistema inmunológico y la producción de interferón, una proteína que, como detalla el experto Julián Correa, de Saluspot, produce el sistema inmunitario de manera natural como respuesta a los virus.
Además, se necesita para la formación de colágeno de las membranas celulares y para mantener barreras naturales contra infecciones. «El kiwi ofrece más del doble de vitamina C que la naranja y alivia el estreñimiento», señala.
También es uno de los alimentos destacados por la nutricionista de Medicadiet, Vanessa Buitrago, quien detalla que con el consumo de un kiwi de tamaño medio se cubre el 85% de la ingesta diaria recomendada de vitamina C, un nutriente que ayuda a disminuir la duración de los síntomas del resfriado, fortalece el sistema inmunitario, actúa como antioxidante, combate los altos niveles de colesterol, mejora la calidad de la piel, el estreñimiento (por la fibra insoluble que contiene) y la digestión, gracias esto último a la actidina, una enzima que contiene, según revela la experta.
Almendras.
Son ricas en varios nutrientes, especialmente en hierro (cuya carencia puede afectar a la proliferación celular) y la vitamina E (con alta capacidad para potenciar la respuesta inmunitaria).
Así, según detalla el experto Julián Correa, la administración de hierro y vitamina E a personas inmunodeprimidas incrementa la respuesta de su organismo, según diversos estudios científicos.
Avellanas.
Sus beneficios en relación a los procesos catarrales se deben a su contenido en vitamina E, según explica Vanessa Buitrago, nutricionista de Medicadiet, pues ésta induce la proliferación de células de defensa y aumenta la respuesta celular ante un daño o infección.
Con un puñado de avellanas se cubre más del 35% de las recomendaciones diarias de esta vitamina.
Además, por su poder antioxidante tiene un efecto preventivo adicional frente a las enfermedades cardiovasculares y por su contenido en fibra regula el peristaltismo intestinal, protegiendo la pared del colon y ayudando contra el estreñimiento.
Miel.
Tal como recuerda la experta de Medicadiet, en el estudio ‘Effect of Honey, Dextromethorphan and No Treatment on Nocturnal Cough and Sleep Quality for Coughing Children and their parents’ publicado en la revista Archives of Pediatrics and Adolescent Medicine, se observó que el efecto antitusivo se la miel en los niños era similar al del dextrometorfano (medicamento antitusivo).
Así, la experta explica que la miel no sólo actúa como un potente antimicrobiano, sino que tiene un papel preventivo. «Su alto contenido en azúcares, así como su reducido pH y acidez impiden el desarrollo de microorganismo.
Eso sí, conviene consumirla con moderación, precisamente por su alto contenido en glucosa y fructosa. Mezclada con avellanas es un buen remedio para la tos crónica y favorece la expectoración», explica.
Uchuva.
Es una fruta que proviene de América del Sur, aconsejada por la experta Françoise de Valera, de snackgods.com.
Entre sus beneficios para la salud destaca que tiene propiedades antivirales, antiinflamatorias y antioxidantes, además de aportar provitamina A, vitamina D y C, importantes para reforzar el sistema inmunológico.
Destaca también por contener calcio, hierro, fósforo, magnesio y pectina. En líneas generales y, tal como recuerda Ana Márquez, dietista-nutricionista y portavoz de Doctoralia, la alimentación en su conjunto, en cantidad suficiente, equilibrada en sus nutrientes y adaptada particularmente al individuo puede mejorar la salud e incrementar las posibilidades de mantener el sistema inmunitario alerta para protegernos de diferentes patologías.
En este sentido, la experta recuerda que no hay ningún alimento que nos refuerce las defensas por sí mismo o que cure de un resfriado, pero sí hay muchos alimentos repletos de vitaminas, minerales, fibra dietética o antioxidantes que participan del correcto funcionamiento del sistema inmunitario y, si dicho sistema funciona bien es probable, como señala la Dra. Márquez, que llevemos mejor ciertas afecciones.
Así, más que recomendar un alimento, la experta de Doctoralia aconseja grupos de alimentos como las frutas, los frutos secos, las hortalizas y las verduras (todos ellos de temporada), las legumbres y los granos enteros.
Figurarían entonces en la lista de la compra aconsejada alimentos propios del otoño como calabaza, calabacines, berenjenas, brócoli, acelgas, naranjas, mandarinas, granadas, manzanas, peras, chirimoyas, castañas o boniato.